Edimburgo, entre leyendas y embrujos
Edimburgo es una de esa ciudades fascinantes donde las leyendas y castillos embrujados forman parte de su entorno. Para disfrutarla basta con caminar por sus callejuelas medievales.La parte antigua de Edimburgo se llama el "Old Town", dominada por el imponente Castillo de Edimburgo en el tope de un volcán no activo (Castle Rock), en su entrada descubrimos estatuas William Wallace, guerrero escocés del siglo XIII. Desde allí la vista de la ciudad es impresionante.
En la Royal Mile (Milla Real), calle arteria principal del Edimburgo medieval, al lado del castillo, se encuentra la Casa del Whisky escocés (Scotch Whisky Experience), donde explican el proceso de producción y la historia del Whisky Escosés. Lo mejor de todo: ¡te dan una muestra gratis! También hay un bar y una tienda con una gran variedad de whisky.
Al final de la Royal Mile se haya el Palacio de Holyrood, vivienda oficial de los Reyes actuales cuando vienen a Edimburgo. Fué la residencia de María Estuardo, Reina de Escocia a su regreso de Francia en 1561. Se pueden visitar las habitaciones reales, los jardines y las ruinas de la abadía. Se dice que en las noches se escuchan los pasos del fantasma del amante de María, el cual fue asesinado por su segundo esposo Lord Darnley. Por supuesto la visita del Palacio incluye ver el lugar exacto donde fue apuñalado.
Mi calle preferida de la Ciudad Nueva (New Town) es Princess Street.
Con muchísimas tiendas, rodeada de edificios georgianos y los famosos jardines, donde se puede ver el bellísimo reloj en la grama, allí también se encuentra el monumento al autor de Ivanhoe, Sir Walter Scott.
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