De paseo por la costa oeste de Irlanda
En el condado de Galway visitamos el castillo más fotografiado de Irlanda, el Dunguaire Castle.
Cuentan que el dueño del castillo era muy generoso y que lo sigue siendo en la otra vida, la tradición dice que al cruzar su entrada del castillo debes hacer una pregunta que te inquiete y al final del día encontrarás la respuesta.
Cuando llegamos a las colinas del Burren quedamos impresionados con el paisaje tan inusual, ¡es un lugar increíble!, el suelo está cubierto por rocas aisladas, entre ellas florecen varios tipos de arbustos y peculiares flores silvestres. Acá nos encontramos con tumbas megalíticas y maravillosas cruces celtas.
Dentro del Burren está el Leamaneh Castle, un castillo construido alrededor de 1500. Y el poblado de Kilfenora, el cual fue muy importante en época medieval para la iglesia católica.
A Kilfenora la llaman la "Ciudad de las Cruces", en referencia a las Cruces Celtas que se encuentran dentro y en los jardines de su encantadora catedral en semi ruinas.
Al llegar a los Acantilados de Moher, a pesar del viento, la neblina y la llovizna perenne, esta roca de más de 200 metros de altura nos impresionó, no en vano es catalogada como uno de los espectáculos naturales más impresionantes de Europa. Desde allá pudimos observar las islas Aran.
En la Costa Oeste de Irlanda cuando miras el mar te llenas de inspiración, pero la brutal desolación del Burren donde todo es silencioso, de una calma indescriptible, te hacen entender claramente porque la espiritualidad de los celtas se basa en la naturaleza
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